Desde hace algo más de cuarenta años, vengo traspasando a figuras de plomo las influencias que libros, películas, ilustraciones e incluso "comics", han ido dejando en mí.

Las figuras que pinto, son en su mayor parte "miniaturas militares", ya que ha sido la Historia, especialmente la Antigua y Medieval, mi mayor fuente de "inspiración". Las escalas más frecuentes que utilizo, son las de 15, 25 y 28 mm. Son las mismas que utilizan los "wargamers", con los que coincido en la necesidad de representar grandes unidades en un mínimo espacio.

Los textos con que acompaño las miniaturas, en ningún caso pretenden ser exhaustivos, ni estudios sobre el período de que se trate. Sólo trato de comentar sucintamente, el ambiente (histórico o imaginario) en que se movieron las figuras representadas.

Animado por amigos y familiares, y especialmente por mi amiga Kirei (artífice además, del soporte técnico que podéis ver), me decido a mostrar públicamente parte de mi colección. Continuaré añadiendo entradas periódicamente.

Llevado de mi impenitente cinefilia, me permito en algún caso, recomendar títulos que pueden ampliar datos a los posibles interesados en los temas tratados.

Espero que os gusten "mis" figuras. Si se os ocurre hacer algún comentario, sugerencia o rectificación, no dudéis en contactarme.

Karth, el enano - Matador de dragones


No me consta que exista ningún relato, cuento, leyenda o novela en la que un enano haya tenido la ocasión, suerte y arrojo suficientes como para matar un dragón.


Aunque entre los Siete Pueblos en que se dividía su raza, tal vez existió alguien  especialmente valiente que logró tal hazaña. Con el apoyo de Aulë, desde luego.  ;)


No sería extraño, ya que el apego al oro y las gemas preciosas era una pasión tan presente entre los dragones como entre los enanos, por lo que en alguna profunda mina pudieron haber coincidido dos representantes de sus respectivas razas, con el enfrentamiento consiguiente y el resultado que presenta nuestra figura.


En cualquier caso, en los primeros años de la década de los ochenta, los afamados hermanos Perry, que en la época militaban en Citadel (una de las primeras marcas de figuras de fantasía que llegaron a nuestro país), imaginaron y plasmaron en plomo la escena.


Tuve ocasión de adquirir la figura (que me subyugó a primera vista) en una especie de baratillo que se organizaba por aquellos años en los bajos de una galería comercial sita en la calle Goya de Madrid.


Pinté al enano y al dragón en unos tonos que no tenían nada que ver con la apariencia que presentan actualmente. Baste decir que pinté al enano moreno y con la barba negra; y al dragón, en tonos verdosos. Los colores quedaron bastante "planos", pero para la época, me valía. La figura ha estado durante cuarenta años durmiendo el sueño de los justos en el fondo de un cajón.


Y cuando en el foro de "La Armada", en enero pasado (2018), surgió el tema de pintar enanos para el evento "Enanero", recordé al "matador de dragones", lo rescaté del cajón, le di un baño en aguarrás (la figura estaba pintada con esmaltes Humbrol) y lo repinté como podéis ver. Creo que esta nueva coloración actualiza la figura sin que pierda el sabor "old style", que en mi opinión, es su mayor atractivo.


Aproveché la ocasión para "bautizar" al enano, cosa que no había hecho anteriormente, y me pareció oportuno darle el nombre de Karth (el final de mi propio nick, evidentemente). Y bueno, creo que ahora Karth y su víctima quedan lo suficientemente presentables como para pasarlos al blog. 

Lo que ocurre, es que ahora me ha entrado el gusanillo "enanil" y ya me he agenciado una banda de enanos, con lo que "la montaña de plomo" seguirá creciendo... inevitablemente.  :) 



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La figura, de Citadel Miniatures.
Ref: DS9 Dwarf Dragon Slayer
(25mm, metal)



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